El ministro de Sanidad y secretario de Organización del PSC, Salvador Illa, será, finalmente, el número 1 de la lista de los socialistas catalanes para las elecciones autonómicas del próximo 14 de febrero. A pesar de que en junio Illa había negado esta posibilidad, el partido ha decidido que sea él y no Miquel Iceta o Nuria Marín quien lidere la candidatura del PSC a unos comicios cuya celebración está en el aire por culpa de la pandemia del COVID-19.
«Estoy concentrado en el trabajo», dijo Salvador Illa el pasado mes de junio cuando, en una entrevista, le preguntaron si cabía la posibilidad de que fuera candidato en Cataluña. El titular de Sanidad, que nada más llegar al ministerio tuvo que gestionar la trágica crisis del COVID-19, aseguró entonces que el secretario general del partido, Miquel Iceta, sería la cara visible en unas elecciones cuya fecha aún se desconocía puesto que el entonces presidente autonómico Quim Torra no había sido todavía inhabilitado. «Es», dijo Illa sobre su jefe de partido, «el mejor candidato que se pueda presentar».
Lo cierto es que muchos barajaban el retorno de Illa a la política catalana. No tanto por considerar que haya fracaso en el Sanidad sino porque en el partido tenían constancia de que el ministro goza de muy buena imagen de cara al electorado. Algo que pudieron comprobar en las campañas para las elecciones gallegas y las vascas, en las que el ministro fue el más demandado por los militantes para participar.
