El Consell per la República ha convocado a sus seguidores al llamado «Pleno de la Asamblea de Representantes» que se reunirá con el fin de elegir al presidente de la entidad. Es más que probable que este cargo lo ostente el fugado Carles Puigdemont, que ya ejerce como líder de la asociación aunque de manera provisional. La asamblea, una suerte de Parlament fake, está presidida por la cupaire Ona Curto y forman parte de la misma ciudadanos anónimos y, sobre todo, representantes de Junts.
Aunque Puigdemont no ha presentado aún su candidatura formal, pocos dudan de que será él quien se erija como presidente del Govern paralelo de Waterloo. O, como dicen los separatistas, del «Govern en el exilio». Hace escasos días, el líder de Junts sacó pecho presentándose como «presidente legítimo» de Cataluña «ilegítimamente» destituido por el Gobierno central mediante la aplicación del artículo 155 de la Constitución. En esa misma intervención, Puigdemont se refirió al Govern de Aragonés como «el Govern del interior«, dando por hecho, aunque sin mencionarlo, que su asociación representa el Ejecutivo del exterior.
El acto tendrá lugar el próximo 5 de marzo y se llevará a cabo bajo las reglas de un reglamento publicado en el sorprendente Boletín Oficial del Consell per la República Catalana.
