Es sabido que en Cataluña se aplica la inmersión lingüística escolar de manera férrea, sin hacer excepciones. Así lo evidencia, de nuevo, el caso que ha dado a conocer la Asamblea por una Escuela Bilingüe de Cataluña, que ha relatado que un centro de Educación especial de Badalona —ciudad de mayoría castellanohablante— practica el monolingüismo vehicular en catalán con sus alumnos. «Centro de Educación Especial Can Barriga en Badalona, mayoría de alumnos castellanohablantes, con necesidad de soporte intenso y permanente», describe la entidad en Twitter.
«Pero da lo mismo, porque la única lengua vehicular es el catalán, dentro y fuera del aula y con las familias también», añaden. Y rematan: «Esto es la inmersión». Así, en el documento que aporta la entidad, se puede leer que los todos los alumnos del centro, de edades entre 12 y 21 años, sufren discapacidad intelectual y «en algunos casos trastornos y alteraciones en el desarrollo de la comunicación y el lenguaje». Pese a ello, el texto mantiene que el «catalán, como lengua vehicular, es la utilizada generalmente dentro y fuera de las aulas, así como toda la información que se emite en circulares, reuniones, página web y redes sociales.
