Recientemente, la entidad ultra Plataforma per la Llengua —conocida por espiar la lengua de los niños en el patio y organizar escraches contra comercios que usan el castellano— aseguró que la «ONU muestra preocupación por la situación del catalán en la escuela y pide revisar las sentencias del TSJC en contra de la inmersión». Y para demostrarlo, la plataforma ha compartido la respuesta de un relator especial de la ONU a su requerimiento sobre las resoluciones judiciales en España sobre el 25% de castellano en las escuelas. En su respuesta, Fernando de Varennes se muestra preocupado por la situación que le ha descrito la plataforma, dado que puede «suponer una grave tendencia para el grupo lingüístico minoritario catalán al limitar la educación en lengua catalana».
Sin embargo, cabe aclarar que dicho relator no es la ONU ni tiene capacidad de decisión. Su labor es recibir información de Estados o entidades relacionadas con el respeto a los derechos de las minorías y enviar comunicaciones al respecto, así como elaborar informes anuales. Pero nada de ello es vinculante ni se corresponde con el dictamen oficial de Naciones Unidas. En cualquier caso, según ha destacado la autodenominado ONG del catalán, el relator ha asumido el relato secesionista, afirmando que la inmersión es exitosa y que no supone un menoscabo para el castellano. En este sentido, insta al Ejecutivo español a garantizar los derechos de las minorías aludidas en su carta.
