La exigencia de tener un conocimiento alto de catalán alcanza ámbitos laborales cada vez más insospechados. Si recientemente el sindicato del taxi propuso que el B2 de catalán sea obligatorio para los conductores de este transporte, ahora esta exigencia se extiende a otra profesión en la que las aptitudes lingüísticas no parecen primordiales: la de forense. Así se puede comprobar en una oferta publicada en el portal de la Generalitat por el Instituto de Medicina Legal y Ciencias Forenses de Cataluña —la oferta caducó hace dos años pero sigue publicada en la página web mencionada—.
«En la bolsa de trabajo para técnico en patología forense de la Generalitat de Cataluña exigen acreditar un nivel B2 de catalán o pasar un examen de dicho idioma», detalla en su perfil púbico de X el presidente de CCC. Y añade con ironía: «¡Hay que garantizar que los forenses hablan en catalán a sus pacientes! Mientras no les respondan…». El tuit de Escolano ha acumulado un centenar de likes, pero en los comentarios abundan los insultos de internautas separatistas que le reprochan su presunto odio al catalán.
