Ahora que Junts ha conseguido el sí del socialista Sánchez a que Cataluña gestione las competencias en materia de inmigración, la posconvergencia comienza a hablar abiertamente de su pretensión de expulsar de esta comunidad autónoma a los extranjeros que reincidan en la delincuencia. Un discurso habitual en formaciones de ultraderecha como Vox, Aliança Catalana o los partidos de la italiana Meloni y la francesa Le Pen. Muchos separatistas se han echado las manos a la cabeza al ver cómo Junts habla abiertamente de expulsiones sin contemplaciones. Entre ellos se encuentra el líder de ERC, Oriol Junqueras, que en un mensaje publicado en X ha advertido a sus otrora socios de Govern sobre los peligros de «abrazar discursos de la extrema derecha».
Sí al traspaso de competencias pero…
Molesta se ha mostrado también la líder de Catalunya En Comú-Podem, Jéssica Albiach, quien en la misma red social ha alertado contra el riesgo de «criminalizar a las personas migrantes, como hace Junts». «Queremos», ha añadido, «que Cataluña continue siendo la tierra de acogida que siempre ha demostrado ser».