Esta madrugada, un devastador atentado ha dejado al menos 15 muertos y más de 35 heridos en la icónica calle Bourbon de Nueva Orleans. Shamsud Din Jabbar, un hombre de 42 años, sería el autor del arrollamiento de una multitud de personas en Año Nuevo con una camioneta alquilada, desatando el pánico en medio de las festividades. Tras el arrollamiento, el sospechoso disparó contra la multitud y la policía, y, tras un enfrentamiento con estos últimos, fue abatido.
El FBI ha iniciado una investigación exhaustiva, pues en el vehículo encontraron una bandera del ISIS y artefactos explosivos. Las autoridades están analizando si Jabbar actuó solo o si contaba con cómplices. La alcaldesa de Nueva Orleans, LaToya Cantrell, ha calificado el incidente como un «atentado terrorista”.
🇺🇸 Alcaldesa de Nueva Orleans confirma que el atropellamiento de peatones de las últimas horas (12 muertos, decenas de heridos) fue un “ataque terrorista”. pic.twitter.com/vICUMrgfOh— Alejo Schapire⚡️ (@aschapire) January 1, 2025
La policía de Nueva Orleans, que estaba en alerta máxima para el evento del Sugar Bowl, se enfrenta a un desafío monumental en la investigación de este ataque. La comunidad está en estado de shock y las autoridades han instado a la población a mantenerse alerta ante posibles amenazas. Este trágico suceso no solo ha interrumpido las celebraciones de Año Nuevo, sino que también ha reavivado el debate sobre la seguridad en eventos públicos y la creciente preocupación por ataques de este tipo en Estados Unidos.