Joseph Oughourlian, presidente de PRISA, ha lanzado un contundente mensaje desafiando al Gobierno de Pedro Sánchez. En un artículo publicado en El País, el empresario ha defendido inequívocamente la independencia editorial y la libertad del grupo mediático, denunciando «injerencias gubernamentales» que buscan controlar medios independientes. La alusión a intentos de «adueñarse» de PRISA desde el poder, incluso usando empresas estatales, apunta directamente a las recientes maniobras de Moncloa, que habría intentado reproducir la estrategia que aplicó en Telefónica para desplazar a Oughourlian y alinear al grupo con sus intereses.
El presidente del Grupo PRISA, Joseph Oughourlian, estrena el cargo de presidente del diario El País con esta tribuna llena de dardos al Gobierno por intentar tomar el control del grupo editor. https://t.co/5JdMFCxtoh pic.twitter.com/ex0DVrNWyU
— José Ignacio Wert (@JoseIgnacioWert) March 17, 2025
El contexto no deja lugar a dudas: tras el éxito del Gobierno en copar Telefónica – con la entrada del 10% del capital y el nombramiento de Marc Murtra como presidente-, PRISA se ha convertido en el siguiente objetivo. Oughourlian recuerda episodios históricos para resltar la resiliencia de su medio, como el enfrentamiento con el gobierno de Aznar, pero su advertencia sobre repetir tales presiones en el 50 aniversario de la muerte de Franco es una crítica directa a Sánchez. «Una sociedad democrática necesita medios que defiendan a los ciudadanos más allá de intereses políticos o económicos«, escribe, subrayando el rechazo a ser un instrumento de un Ejecutivo demasiado pendiente del poder mediático estatal.
Recientes tensiones confirman esta batalla. En febrero de 2025, el ministro Óscar López y Murtra presionaron a Vivendi, accionista clave de PRISA, para que vendiera su participación a empresarios afines al PSOE, amenazando con retirar publicidad de Telefónica. Sin embargo, Oughourlian, respaldado por Vivendi, frustró el plan al consolidar su liderazgo y rechazar un proyecto de televisión afín a Moncloa, bautizado por muchos como «TelePedro». Su artículo reafirma esta resistencia: «Sería inaceptable que alguien cayera en la tentación de controlar un medio desde el poder», un dardo directo al intento fallido de «OPA».
Con casi 50 años de historia «defendiendo la democracia», PRISA, bajo Oughourlian, se planta ante Sánchez. Citando a Orwell –«Periodismo es publicar lo que alguien no quiere que publiques»– el presidente de PRISA promete mantener su rumbo, pese a las represalias que puedan venir. Mientras el Gobierno maniobra para ampliar su influencia mediática tras Telefónica, el desafío de Oughourlian marca un punto de inflexión: PRISA no se doblegará, y la lucha por su independencia está más viva que nunca.