Tal y como adelantaban las previsiones electorales, Reform UK, de Nigel Farage, ha logrado un avance más que significativo significativo en las elecciones locales celebradas ayer en Inglaterra, consolidándose como una fuerza disruptiva en el panorama político británico. En un contexto de descontento generalizado con el gobierno socialdemócrata de Keir Starmer y la debilidad de los tories, el partido capitaliza el voto de protesta, empieza a adueñarse del conservadurismo moderado y avanza posiciones en el tablero político inglés.
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— Reform UK (@reformparty_uk) May 2, 2025
Uno de los resultados más destacados se ha dado en la elección parlamentaria parcial de Runcorn y Helsby, donde Reform UK ha arrebatado un escaño a los laboristas, elevando su representación en Westminster a seis diputados. Si bien la representación es aún modesta -debido en gran medida al sistema elcetoral británico, que castiga severamente a las opciones políticas ajenas al bipartidismo-, en las elecciones a alcaldías, Andrea Jenkyns se ha alzado con la victoria en Greater Lincolnshire, asegurando el 42% de los votos. Además, ha quedado en segundo lugar en North Tyneside, Doncaster y West of England, rozando la victoria en la primera por 500 votos.
En los comicios locales, Reform ha ganado al menos 79 concejales,creciendo desde el 14.3% de votos en 2024 al 25% en encuestas recientes y erosionando la base de los laboristas en áreas obreras y de los conservadores en zonas rurales.
El sistema mayoritario limita su proyección de escaños. En un sistema proporcional parecido al español, por ejemplo, el partido sería la segunda fuerza en la Cámara de Representantes -actualmente son los novenos-. Con todo, Reform UK está redibujando el mapa político, especialmente en regiones pro-Brexit. Los resultados completos, esperados hoy, nos confirmarán si este ascenso es el inicio de una transformación duradera.
Este éxito refuerza la narrativa de Reform como alternativa al establishment. Ante la debacle de los conservadores, el partido se postula no solo como voto de protesta contra el bipartidismo, sinó también como alternativa electoral para el votante moderado.
