El Col·legi d’Educadores i Educadors Socials de Catalunya (CEESC) ha advertido este jueves que el escándalo de la menor custodiada por la DGAIA que ha sido violada en repetidas ocasiones «no es una excepción». En un comunicado citado por distintos medios, el CEESC ha recordado que los profesionales llevan tiempo denunciando las «deficiencias estructurales» del sistema de protección de menores catalán así como la falta de «recursos y reconocimiento» para que estos profesionales puedan desarrollar su trabajo.
Apuesta por un «cambio profundo»
El CEESC ha señalado en su nota que es necesario un «cambio profundo» en las políticas de infancia y adolescencia y ha pedido «pasar de un enfoque de protección reactiva a una mirada comunitaria, de trabajo preventivo y centrada en los derechos». El colegio profesional, además, considera que es necesario que haya «presencia estructural» de los educadores sociales en ámbitos como los servicios sociales, los servicios de intervención socioeducativa, los centros escolares, las actividades extraescolares y deportivas y los espacios de participación de la infancia y la juventud.
Desde el CEESC, finalmente, se ha pedido a los medios no poner el foco en la menor abusada «y señalar con claridad la responsabilidad de los agresores«. Y se ha recordado que, si este tipo de información no se trata con cuidado, se puede producir «una revictimización injusta, desviando el centro de la cuestión: la violencia ejercida por parte de un adulto y la responsabilidad del sistema a la hora de prevenirla y de actuar con contundencia».
