Sandra Hoyos, la abogada de Paulina Rubio, ha aparecido en el programa de “TardeAR”, para esclarecer los conflictos familiares que rodean a la cantante. Según la versión de Colate, Paulina Rubio habría castigado a su hijo quitándole el teléfono móvil y, después de una acalorada discusión, le habría propinado un manotazo.
«Paulina, como cualquier madre que es falsamente acusada, está un poco disgustada ante esta situación», ha comentado la letrada. Según explicó en el programa, Paulina Rubio no está siendo objeto de una investigación por un supuesto abuso. «No hay ningún psicólogo que lo haya confirmado, ninguna corte que lo haya firmado, y la terapia no fue exclusiva para Paulina Rubio, sino para toda la familia», ha señalado. Es decir, tanto Colate Vallejo-Nágera como su hijo deberán participar en las sesiones establecidas por el tribunal de Estados Unidos.
Desmentido público
Con estas declaraciones, la abogada ha desmentido las informaciones difundidas en los últimos días y ha dejado claro que Paulina Rubio no está siendo investigada por agredir a su hijo. Además, ha revelado que la cantante emprenderá acciones legales contra Colate con el objetivo de impedir que continúe hablando sobre este asunto con los medios. Lo acusa de filtrar información falsa a la prensa, lo que, según ella, perjudica únicamente al hijo de ambos.
Según ella lo ocurrido no fue más que una simple discusión. «En ningún momento se reportó que la policía llegó a llevarse a Paulina, que es lo que hubiera ocurrido aquí en Estados Unidos si alguien tan solo le pusiera la mano encima a un menor de forma negligente».
Sandra Hoyos también afirmó que en este caso no se ha involucrado el Departamento de Niños y Familia ni hay psicólogos que hayan emitido diagnósticos.
La portada en ¡Hola!
Sobre la portada de la revista ¡Hola!, en la que aparece Paulina Rubio con sus hijos, una decisión tomada sin la participación de Colate, Hoyos aseguró que, aunque fue unilateral, en Estados Unidos no es ilegal.
Paulina Rubio se mantiene al margen
La defensa de Paulina Rubio insiste en que no existe ninguna causa legal abierta por maltrato y que las acusaciones públicas solo contribuyen a dañar la imagen de la artista y, sobre todo, el bienestar del menor. La cantante, por su parte, prefiere mantenerse al margen mediáticamente mientras su equipo legal actúa para proteger tanto su reputación como la estabilidad emocional de su hijo.