La Sexta rectifica. La cadena progresista, espacio mediático afín al Gobierno, se ha visto obligada a pedir disculpas públicamente y rectificar unas graves informaciones en las que se acusaba a Juan Vicente Bonilla, exagente de la UCO, de haber conspirado para atentar contra la vida del presidente del Gobierno con una bomba lapa. La asunción se dio tras una interpretación errónea por parte de los redactores de la cadena de una conversación de WhatsApp entre el agente y un confidente, obtenidos del sumario de un juicio sobre el caso Gaslow. Lo que verdaderamente reflejaban los mensajes era el temor de Bonilla a que el Gobierno atentara contra su vida debido a sus indagaciones. Una manía persecutoria algo exagerada, sí, pero que en ningún caso refleja indicios de delito, mucho menos de magnicidio.
La Sexta ha rectificado.
— Alberto Núñez Feijóo (@NunezFeijoo) May 31, 2025
Ahora solo queda que lo haga el Gobierno. pic.twitter.com/VSTHACVyp7
La cadena ha rectificado inmediatamente, pidiendo disculpas y explicando el error. Quién aún no lo ha hecho es el PSOE, cuyos perfiles más beligerantes tardaron muy poco en hacerse eco de la fake new para desviar la atención de las múltiples y contundentes acusaciones que pesan sobre los socialistas. El mismo Feijóo ha señalado la inconsistencia, instando al partido de Gobierno a desdecirse de sus desafortunados comentarios al respecto. Su única reacción ha sido borrar los mensajes, sin disculpa ni corrección.
🔴 Tres ministros han difundido una información errónea que aseguraba que el exagente Juan Vicente Bonilla quería atentar contra el presidente del Gobierno https://t.co/A9LxALqIIA
— Antena 3 Noticias (@A3Noticias) May 31, 2025
No estaría de más los adalides de la verdad y el buen hacer político se aplicaran sus mismos estándares de conducta. Ministros del Gobierno dieron eco a las informaciones en cuestión de minutos, acompañándolas de duros juicios y dedicando un escarnio particularmente agresivo a la UCO y la Guardia Civil. Su beligerancia no es casual; ahora toca desacreditar. Desacreditar a los fiscales, las autoridades policiales y los jueces. Desautorizar ante la opinión pública a cualquier órgano que pretenda fiscalizarlos en pleno proceso de investigación ante su clamorosa presunta corrupción.