Taylor Swift ha conseguido una orden de alejamiento contra un nuevo acosador. En este caso, se trata de Brian Jason Wagner, un hombre de 45 años que ha acosado a la cantante durante años, afirmando que ella es la madre de sus hijos y presentándose con frecuencia en su residencia de Los Ángeles.
Declaraciones
«Hizo varias declaraciones sobre vivir en mi propiedad, estar en una relación conmigo, creer que soy la madre de su hijo y afirma necesitar verme en persona. Todo lo cual es falso y está desconectado de la realidad», se puede leer en la demanda presentada por el equipo legal de la artista y publicada en el medio estadounidense “Page Six”.
De acuerdo con la denuncia, Wagner se presentó por primera vez en la residencia de Los Ángeles en mayo de 2024 y volvió en varias ocasiones durante el mes de julio. “En al menos una de las ocasiones, el Sr. Wagner portaba una botella de vidrio que podría haber sido utilizada como arma”.
Taylor Swift señala en el escrito que su equipo de seguridad elaboró un informe sobre los antecedentes penales de Wagner, lo que permitió descubrir que había estado en prisión. Fue entonces cuando supieron que, desde la cárcel, había enviado numerosas comunicaciones a la cantante, en las que relataba historias ficticias sobre una supuesta relación entre ambos, además de haberle enviado correos con amenazas.
«No tengo ninguna relación con el Sr. Wagner y nunca me he reunido ni me he comunicado con él», explica, e insiste que tiene “miedo a un daño inminente”.
«No comparto públicamente mi domicilio y nunca he compartido mi dirección ni la ubicación de mi residencia en Los Ángeles con el Sr. Wagner. Por lo tanto, el hecho de que el Sr. Wagner haya determinado dónde resido y haya visitado la propiedad varias veces, negándose a irse y alegando que necesita acceder, me hace temer por mi seguridad y la de mi familia», ha sentenciado.
Orden temporal
La orden de alejamiento ha sido concedida, aunque de forma temporal. Estará vigente hasta el 30 de junio, es decir, durante 20 días, y establece que el acusado debe mantenerse a una distancia mínima de 100 metros de la cantante.
Una situación que se repite
No es la primera vez que Taylor Swift debe de enfrentarse al acoso. En 2024 la policía de Nueva York detuvo en tres ocasiones a un individuo que se presentó de forma reiterada en una propiedad de Manhattan. En 2018, otro acosador planeó matar a Swift y a toda su familia después de estar durante un año enviando amenazas al padre de la cantante. Esta situación llevó a Taylor a protegerse con vendajes de grado militar para posibles heridas de bala o puñaladas.
Estos casos reflejan el constante acoso al que se ha visto expuesta la artista a lo largo de los años, obligándola a tomar medidas para proteger su seguridad y la de sus seres queridos. Con esta nueva orden de alejamiento, Taylor Swift busca frenar una situación que pone en riesgo su bienestar personal.