VOX Cataluña coge el manual de prácticas de Aliança Catalana. La formación conservadora ha registrado este martes una propuesta de resolución para prohibir el uso del velo islámico en todos los espacios públicos de la comunidad autónoma.
La propuesta será debatida en la Comisión de Asuntos Institucionales y exige la restricción del velo en centros educativos, hospitales, instalaciones deportivas, oficinas de la administración pública, parques y transporte, tanto en recintos cerrados como abiertos, tal y como lo hacía la propuesta de Orriols del pasado mes de mayo. Estas prendas representan una forma de sumisión de la mujer, impuesta en muchos casos por presiones familiares o sociales, y que resultan incompatibles con los valores democráticos y de igualdad que promueve el ordenamiento jurídico, de acuerdo con los razonamientos de ambas formaciones.
El texto es tajante, y propone sancionar a quienes obliguen a mujeres a vestir estas prendas y contempla incluso la suspensión de trámites de nacionalidad en casos de coacción. Se citan precedentes europeos en países como Francia, Bélgica o Suiza, donde existen restricciones similares aprobadas por gobiernos de distinto signo ideológico.
La propuesta, como cabía esperar, ha sido rechazada de plano por los principales grupos del Parlament, incluyendo PSC, ERC, Junts, Comuns y CUP, que la acusan de atentar contra la libertad religiosa. Si esa religión atenta contra derechos fundamentales es, por lo que se ve, secundario.
VOX, por su parte, subraya que su iniciativa no busca vulnerar derechos, sino garantizar que todas las mujeres en Cataluña puedan vivir libres de imposiciones culturales o religiosas contrarias a la dignidad humana. En un contexto europeo cada vez más atento al papel del islamismo en las sociedades occidentales, el debate sobre el velo vuelve al centro del escenario político.
