La visita del presidente de la Conferencia Episcopal Española, Luis Argüello, a Vic se vio truncada por el hostigamiento de partidos y entidades de corte nacionalista. A través de un comunicado, la Corriente Social Cristiana ha denunciado que se suspendiera la misa mayor de San Miguel de los Santos, conmemorando el 400º aniversario del santo y patrón de la capital de Osona, el pasado 5 de julio, durante la fiesta mayor del municipio.
Cargos públicos
Desde la plataforma sostienen que cargos públicos y militantes de ERC, CUP y Vic En Comú se desfondaron, apoyados por comparsistas y los CDR, para impedir la celebración. En primera instancia, tan solo expresaron su rechazo a la visita de Luis Argüello mediante posicionamientos públicos, una acción que la propia Corriente Social Cristiana ha calificado como “legítima”.
En segunda, y he aquí donde radica el problema, advirtieron que iban a convocar “protestas ruidosas para impedir que se escuchara la homilía e incluso acciones en el interior de la Catedral”.
Silencio
Ante este panorama, señalan desde la plataforma, los Mossos d’Esquadra solo emitieron un informe sugiriendo que parte del patrimonio de la infraestructura eclesiástica podría resultar dañado en caso de boicot. Una respuesta, la de las autoridades, que ha indignado a los católicos catalanes: “Deberían haber garantizado el derecho fundamental a la libertad religiosa”, protestan.
Actitud similar adoptó el consistorio, que no se pronunció y mantuvo el resto de actividades programadas, y la administración Illa, informada por el Obispado, para quien estas amenazas tampoco merecieron una repulsa pública.