El separatismo de calle está en horas bajas. Ni siquiera la presencia de Felipe VI, Letizia y sus hijas en Cataluña logra ya movilizar a los independentistas como sucedía antaño. Así se pudo comprobar ayer en Barcelona, donde había casi más policías y periodistas que manifestantes a las puertas de Liceu, escenario de la entrega de los Premios Princesa de Girona.
La Assemblea Nacional Catalana (ANC) había convocado a los suyos en la Plaça Sant Jaume a partir de las 18.00 horas bajo el lema Ni a Montserrat, ni al Liceu. El rei, a Catalunya, ni un peu. Y fueron muy pocos los que hicieron caso al llamamiento, a tenor de las imágenes publicadas por la propia ANC en sus redes sociales.
En las mismas redes sociales, la ANC ha criticado el amplio dispositivo de seguridad desplegado en torno al Liceu. Un dispositivo habitual durante los desplazamientos de los Reyes y que incluye francotiradores que, según los separatistas, apuntaban a los manifestantes.
Por otro lado, unas 50 personas se manifiestan en estos momentos en Coordinadora Antimonárquica de las Comarcas Gironines en Sant Martí Vell, municipio que los reyes tienen previsto visitar esta mañana.