La hospitalización de José María Ángel Batalla, excomisionado del Gobierno para la reconstrucción tras la DANA, ha derivado en un encendido cruce de reproches en redes sociales. Batalla, investigado por presunta falsificación de un título académico para acceder a la Diputación de Valencia en 1985, permanece ingresado en el Hospital de Llíria en estado grave pero estable, tras, afirman los medios, un intento de suicidio ocurrido hoy mismo por la mañana.
En estado de shock y rotos de dolor por el estado de Jose María Ángel. Todo mi cariño y afecto hacia él y su familia en estos momentos tan duros, después de semanas de acoso. José María, ojalá que te recuperes lo más pronto posible. Estamos a tu lado.❤️🌹 pic.twitter.com/GY5uqwmF0g
— Diana Morant (@DianaMorantR) August 8, 2025
Pocas horas después de conocerse el ingreso, la ministra Morant ha publicado un mensaje en X en el que, además de expresar su apoyo, atribuye lo sucedido a “semanas de acoso”. “José María, ojalá que te recuperes lo más pronto posible. Estamos a tu lado”, cierra.
Las palabras de Morant han sentado mal, provocando una oleada de respuestas. La condena a sus implicaciones es clara y uniforme; el PSOE y medios afines protagonizaron una intensa campaña de presión contra la entonces portavoz del PP en Fuenlabrada i diputada, Noelia Núñez, por las inconsistencias en su currículum. La dirigente popular, que figuraba como licenciada sin haber terminado los estudios, fue objeto de titulares diarios, editoriales críticos y peticiones públicas de dimisión desde el propio PSOE y una encarnizada y visceral militancia. Este patrón de conducta se ha ido emulando entre partidos a medida que han ido saliendo casos.
Las hostilidades en redes respecto a los méritos académicos comenzaron, de hecho, con el ministro de Transportes, Óscar Puente, que dedicó varias publicaciones a cuestionar a Núñez en su habitual tono. La presión fue creciendo hasta desembocar en su dimisión, acompañada de reclamaciones para que entregara su acta de concejala.
No ha sido acoso, sino la denuncia legítima de la presunta falsificación de un título universitario por parte de un político, algo muy grave. Ni cotizaba que ibais a utilizar políticamente un supuesto intento de suicidio. No tenéis límite.
— Rafa López 🇺🇦🇪🇺🇪🇸🇮🇱 🇬🇪 (@Garcio72) August 8, 2025
Le deseo una pronta recuperación. Óscar Puente empezó esta campaña con Noelia: Que no se te olvide.
— Malules (@Malules7532791) August 8, 2025
Nadie desea que sucedan estas cosas, hay personas que no soportan la vergüenza de que sus miserias se hagan públicas y por su parte es bastante carroñero aprovechar para culpar a los demás.
— Ondiñas veñen e van (@Eeeeeehhh1) August 8, 2025
Cada uno es responsable de sus actos.
Recuerde: el que la hace la paga. pic.twitter.com/R9QkNYadH5
Quienes critican a Morant acusan al PSOE de aplicar un doble rasero: condenar el escrutinio a uno de los suyos como acoso, mientras se ha utilizado el mismo mecanismo -según sus propios términos- contra rivales políticos. Los reproches alcanzan también a la prensa próxima al Gobierno, a la que se responsabiliza de amplificar la presión sobre figuras del PP en casos similares.