Sílvia Orriols no tiene complejos. La presidenta de Aliança Catalana vuelve a generar polémica tras manifestar su “admiración” por Benjamin Netanyahu -primer ministro israelí-, en el contexto del conflicto entre Israel y Hamás. Sus declaraciones, en una entrevista con Crónica Global, rompen el consenso catalán y su condena uniforme hacía el Estado judío.
“Admiro a un dirigente político que es capaz de defender a su pueblo hasta el final”. Contundente y sin emperifollamientos. «Si fuera israelí, me sentiría orgullosa de pertenecer a una nación que no deja atrás a ninguno de sus ciudadanos” y que “hace lo posible para recuperarlos a todos”. La líder aprovecha para establecer paralelismos con un hipotético caso en Cataluña: “Si hubiese pasado esto aquí, agradecería que el Govern hiciese lo posible para rescatar a los rehenes”.
Las palabras de Orriols llegan pocos días después de que Netanyahu haya confirmado su intención de ocupar Gaza, aunque no de forma permanente, tras casi dos años de ofensiva militar que han dejado una devastación generalizada.
Desde su posición conservadora, Aliança Catalana atribuye la responsabilidad del conflicto a la organización islamista Hamás, alineándose así con otros sectores que comparten este diagnóstico.
En una Cataluña mayoritariamente volcada en el apoyo acrítico a Palestina, el respaldo explícito de Orriols a Netanyahu marca un distanciamiento político y refuerza una imagen de figura dispuesta a desafiar consensos en temas sensibles y de alta carga emotiva.
