El concejal de ERC en el Ayuntamiento de Barcelona, Jordi Coronas, se encuentra en el centro de una gran polémica. Durante 35 días, participó en la flotilla rumbo a Gaza sin acudir a sus responsabilidades municipales, pero seguirá cobrando su salario íntegro, superior a 80.000 euros anuales.
Este caso ha abierto un debate intenso sobre la compatibilidad entre activismo político y obligaciones públicas, así como sobre el privilegio de la clase política frente al ciudadano común.
Jordi Coronas y la flotilla: ¿activismo o irresponsabilidad?
Coronas defendió su viaje como una misión humanitaria, pero para muchos ciudadanos y usuarios en redes sociales, se trata de un ejemplo claro de activismo con nómina.
Para cualquier trabajador del sector privado, ausentarse durante un mes sin justificar puede significar sanción o despido. Sin embargo, para ciertos cargos electos, el escenario es distinto, algo que genera rechazo y acusaciones de trato especial en la política.
Reacciones en redes sociales: indignación generalizada
El caso ha explotado en X, donde varios usuarios han criticado el hecho:
Ramon Audet: ha calificado la situación de “escandalosa” y se pregunta cómo puede cobrarse un sueldo público por “no hacer acto de presencia durante más de un mes […] cualquier trabajador ausente sería sancionado; aquí, en cambio, se le aplaude”.
Doncs aquí ho tenim, no només hem pagat el vaixell espanyol que va anar a acompanyar-los i els vols de tornada, sinó que gent com en @jordicoronas admet que no va demanar cap excedència.
— Ramon Audet i Sánchez🤠 (@ramon_audet) October 7, 2025
Cinc setmanes fora del seu lloc de feina. Rectifico: cobra uns 80.000€ anuals. https://t.co/8YYhl3VBxx pic.twitter.com/q3tUlSGxFa
Jordi Amela: “Coronas no representa a Barcelona en ninguna flotilla. Representa a sus votantes en el Ayuntamiento. Si no entiende la diferencia, que deje el cargo”.
Reclamo a l’Ajuntament de Barcelona que aquest senyor ( @jordicoronas) no cobri els 35 dies que ha estat absent del seu lloc de treball, i encara ha tingut la barra de dir que mereix cobrar-los. Si tu tampoc creus que aquest “polític honest” hagi de riure’s de tots nosaltres,… pic.twitter.com/jwMHa1rv72
— Jordi Amela 💙 🏴 (@jordiamelabcn) October 7, 2025
El debate político y social: privilegios vs. deberes
Este episodio ha abierto un debate más profundo: ¿hasta qué punto los cargos electos pueden ausentarse de sus obligaciones? ¿Debe permitirse cobrar íntegramente mientras se está en una misión política o humanitaria fuera de la ciudad?
La polémica plantea preguntas clave sobre la transparencia política, el uso de recursos públicos y la responsabilidad ante los votantes.
Quizás sea momento de replantear los convenios laborales: artículo 1, todo empleado podrá ausentarse 35 días, siempre que lo haga en nombre de una causa justa.
Mientras tanto, la indignación sigue navegando —aunque no en flotilla, sino en redes sociales.