El favor de la izquierda mediática es fugaz. Pocos días depsués de la inhabilitación y posterior dimisión de García Ortiz como Fiscal General del Estado, el nombre de Teresa Peramato Martín de Vidales ya ha eclipsado por completo su salida. El Gobierno ha anunciado la propuesta de la hasta ahora fiscal de Sala de lo Penal del Supremo como nueva fiscal general del Estado, y el sector progresista español ha recibido la noticia con una euforia que roza la amnistía emocional colectiva.
El Gobierno avanza con Teresa Peramato.
— Montse Mínguez (@montseminguez) November 25, 2025
Feijóo sigue negociando con Abascal para recortar derechos en Valencia.
Cada día, las diferencias son más claras. #25N
El Gobierno propone a Teresa Peramato como fiscal general del Estado | España | EL PAÍS https://t.co/7HafPW5erU
En redes, la condena a García Ortiz –por revelación de secretos en el caso del novio de Ayuso– ha quedado relegada a un pie de página. El foco está puesto en Peramato, de 63 años, histórica militante de la Unión Progresista de Fiscales y ex fiscal delegada de Violencia sobre la Mujer. Su currículum en políticas de género y su defensa sin fisuras de la ley del “solo sí es sí” han convertido el anuncio en un regalo caído del cielo el mismo Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer.
Buenas noticias@PeramatoTeresa es una magnífica fiscal, feminista, con una larga trayectoria de defensa de los derechos humanos junto a la @UPFiscales , colaboradora de @mujeresjuezas
— Mª Victoria Rosell Aguilar (@VickyRosell) November 25, 2025
Mi apoyo y agradecimiento por asumir el puesto de @fiscal_es en un momento tan difícil.
NUEVA FISCAL
— Victor Guillot (@Espejodevillano) November 25, 2025
Teresa PERAMATO, 35 años de experiencia y fiscal pionera en la lucha contra la violencia sobre la mujer. Bien jugado pic.twitter.com/vTvr1vOscy
El sentir mayoritario en la izquierda ha pasado del agravio a la victoria simbólica. Después de meses de desgaste, el relevo permite al Gobierno proyectar continuidad institucional sin tener que defender más al ya inhabilitado García Ortiz.
En menos de un día, Teresa Peramato ha conseguido lo que parecía imposible hace una semana: que la caída de García Ortiz pase a ser un trámite administrativo.





