Una mujer cuya identidad se desconoce ha presentado una denuncia contra el expresidente del Gobierno Adolfo Suárez, fallecido en 2014, por presuntos abusos sexuales. La denuncia fue presentada ante los juzgados el pasado 9 de diciembre y, según recogen diversos medios, señala al expresidente como autor de esos supuestos abusos de los que la mujer habría sido víctima cuando tenía 17 años.
La denunciante reclama ahora, 40 años después de que sucedieran supuestamente estos hechos, una «reparación social» en forma de, por ejemplo, la retirada del nombre de Suárez del Aeropuerto de Barajas. También reclama que el nombre del expresidente deje ser utilizado en calles y plazas.
Años en silencio
La denuncia ha sorprendido enormemente a muchos puesto que Suárez gozaba de una imagen intachable. Pero, como era de esperar, la izquierda española ha tomado esta denuncia como uno más de sus caballos de batalla para arremeter contra la derecha. Y ahí ha sido donde la periodista Elisa Beni ha tropezado con el sectarismo. Beni ha publicado un mensaje en X que no ha gustado a la izquierda: «No puedes callar toda la vida y luego denunciar a un muerto». Y esto ha desatado un ataque contra ella que ha durado horas.
El escritor Rafael Narbona ha equiparado a Beni con el columnista Juan Soto Ivars, otro de los enemigos imaginarios de la izquierda española, y de ambos ha dicho que «al igual que el doctor Jekyll, a veces cambian de aspecto gracias a una pócima». Otros han sido más expresivos en su rechazo a Elisa Beni.





