Carolina Marín, oro en Río 2016 y triple campeona mundial de bádminton, ha comunicado que se retira temporalmente de las redes sociales tras reconocer que “he colapsado” y que necesita “aislarme de verdad y pensar en mí”. La deportista de élite lo ha compartido en un vídeo publicado en sus perfiles, donde afirma que no está en su mejor momento y que quiere centrarse en recuperar la calma fuera del foco digital.
En su mensaje, la deportista relaciona la decisión con un desgaste acumulado y, especialmente, con el último mes. “Me he dado cuenta… que he colapsado”, señala, antes de añadir que “va siendo hora de pensar en una misma” y que una de las decisiones que tomará será alejarse de las redes durante un tiempo. También agradece el apoyo y apela a la empatía, al defender que es importante mostrar “la parte que queremos esconder” ya que muchas personas (públicas o anónimas) atraviesan situaciones similares.
La pausa llega mientras Marín sigue con la recuperación de la lesión de rodilla sufrida en los Juegos de París 2024, un proceso que todavía mantiene su vuelta a la competición sin fecha pública. En una comunicación previa de la Federación Española de Bádminton se indicaba que la jugadora continuaba con su rehabilitación tras aquella lesión, motivo por el que no formó parte del equipo español en grandes citas posteriores. Ese contexto ayuda a entender por qué la recuperación física y el bienestar emocional van de la mano en deportistas de élite.
"No es solo entrenar o recuperarse de las lesiones, sino estar pendiente de qué material ofrecer a mis seguidores y eso es muy complejo"
— RNE Deportes (@RNEdeportes) December 27, 2025
Joaquín Dosil, psicólogo, sobre la decisión de Carolina Marín de alejarse de las redes pic.twitter.com/98wWBe5dcp
No está confirmado cuánto durará la desconexión, porque la propia deportista no fija un calendario en su mensaje. Lo que sí queda claro es el fondo: poner límites también forma parte del entrenamiento. La salud mental no siempre se ve, pero condiciona el rendimiento, la vida diaria y la forma de afrontar una lesión larga. Carolina volverá más fuerte; esperemos que las redes aprendan a ser un espacio de apoyo, no de veneno.
