El panorama cultural y espiritual en Cataluña está cambiando a un ritmo acelerado. Según los datos de la última edición del Barómetro sobre la religiosidad, elaborado por la Dirección General de Asuntos Religiosos del Departamento de Justicia y Calidad Democrática, el 20% de los catalanes es incapaz de explicar qué se conmemora exactamente en la festividad de Navidad.
Esta cifra, que refleja una desconexión creciente con las raíces tradiciones cristianas, se agrava significativamente cuando se pone el foco en las nuevas generaciones.
Los jóvenes, los menos conocedores
El estudio revela que casi el 32% de las personas entre 16 y 25 años no saben responder correctamente a la pregunta de qué se celebra el 25 de diciembre. En contraste, en el resto de grupos de edad, el nivel de acierto se mantiene en torno al 80%, lo que evidencia una brecha generacional profunda en el conocimiento cultural básico.
El auge del «analfabetismo religioso»
Este fenómeno no es exclusivo del cristianismo. La Generalitat advierte de un aumento del «analfabetismo religioso»generalizado en la sociedad catalana:
- Solo el 63,9% de los catalanes identifica correctamente al Papa como el líder de la Iglesia católica.
- El 67,5% sabe en qué momentos del día se debe ayunar durante el mes de Ramadán.
- Tan solo el 34,6% de la ciudadanía identifica al líder espiritual de los budistas tibetanos.
Desconocimiento en otras confesiones
La encuesta, realizada en colaboración con el Centro de Estudios de Opinión (CEO) desde 2014, también pone de manifiesto que el conocimiento sobre otras religiones con fuerte arraigo en Cataluña —como la ortodoxa, judía, protestante o los Testigos de Jehová— es todavía menor, con tasas de respuesta correcta que no superan el 40% en ningún caso.
Este informe subraya un reto para la gestión de la diversidad en Cataluña, donde el desconocimiento de lo que el barómetro define como «el hecho religioso» parece avanzar de forma imparable entre los sectores más jóvenes de la población.





