Un nuevo episodio de delincuencia ha sacudido la Ciudad Condal. El pasado 26 de julio, cuatro personas accedieron ilegalmente a un inmueble del distrito de Sarrià-Sant Gervasi con la intención de cometer un robo.
Detenidos in fraganti
El grupo, formado por un hombre y tres mujeres cuyas edades oscilan entre los 20 y los 50 años, acumulaba entre todos más de una veintena de antecedentes penales. Dos de las implicadas merodeaban en actitud sospechosa frente a una finca situada en la calle Muntaner, una de las más exclusivas de Barcelona, lo que llamó la atención de una patrulla de los Mossos d’Esquadra.
Al proceder a su identificación, los agentes hallaron durante el registro corporal diversos útiles comúnmente utilizados en allanamientos. En ese mismo momento, y de manera fortuita, los otros dos miembros del grupo bajaban del inmueble cargando varias bolsas de basura repletas de objetos personales, joyas y dinero en efectivo sustraídos a las víctimas, por lo que también fueron interceptados y arrestados.
Registraron su domicilio
Una de las detenidas portaba documentación falsa, pero la policía logró descubrir su verdadera identidad, comprobando que pesaba sobre ella una orden europea de detención y entrega emitida por las autoridades belgas.
Como colofón, dos días después de la operación, los Mossos localizaron parte del botín escondido en el domicilio de los delincuentes y, tras obtener la autorización judicial correspondiente, practicaron una entrada y registro en el que lograron recuperar todos los objetos robados.