bnew2025
bnew2025

La Flotilla zarpa… de nuevo

La Flotilla zarpa... de nuevo
La Flotilla zarpa... de nuevo

Disciplina olímpica. La Flotilla Global Sumud zarpa otra vez, consolidándose como experta en maniobras de arranque. Desde que partió de Barcelona el pasado 31 de agosto, la expedición humanitaria rumbo a Gaza acumula más incidencias que un Cercanías.

Los organizadores insisten en que el objetivo es serio y urgente: llevar ayuda humanitaria a la Franja de Gaza y denunciar el bloqueo israelí. Nada que objetar a la intención, aunque desentona con las dosis de frivolidad que sus integrantes más mediáticos exhiben en sus perfiles sociales. La ejecución tampoco ayuda: recuerda más al itinerario de un espectáculo regulero: barcos que salen y regresan, drones sobrevolando, comunicados solemnes y una narrativa bañada de épica para cuatro motores gripados y mareas adversas.

Greta Thunberg y Ada Colau, convertidas en rostros de la misión, tampoco parecen la mejor elección. La exalcaldesa de Barcelona, que en un inicio reivindicaba el carácter “autoorganizado”, lamenta ahora que los gobiernos no les prestaran una flota “en perfecto estado” para acortar el periplo. Es una pena desaprovechar así su talento para la sátira política.

Por su parte, Israel ya ha advertido que no permitirá el atraque de las embarcaciones y que tratará a los activistas como “terroristas”. Y eso, desde luego, ya no es ninguna broma. Los portavoces de la Flotilla replican con el derecho internacional en la mano. Argumentos sólidos, sin duda, aunque diluidos en el ruido mediático de cada nueva salida de tono.

La iniciativa ha derivado en una suerte de performance flotante. Un stunt político que no parece medir del todo aquello con lo que juega. Gaza, por si quedaban dudas, no es Occidente. Tampoco su vecindad. La liviandad que aquí caracteriza a determinados espacios políticos no es exportable a un contexto de miseria y condiciones extremas. Aquí haces el payaso y recibes cuatro insultos en redes, dos titulares en prensa nacional y la exposición mediática que buscabas, porque somos una parodia de nosotros mismos. Allí, si la providencia interviene, no llegas. Si lo consigues pero aún no has agotado tu suerte, Israel te intercepta, te da unas collejas y te factura de vuelta para casa. Si has agotado toda fortuna, llegas a tu objetivo, y todos sabemos lo que hace Hamás con el perfil que caracteriza a los integrantes de la Flotilla.

Dudo que haya una sola persona en la embarcación que crea -o siquiera quiera- llegar a la Franja; saben lo que puede pasar si lo logran. Por eso confían en el bloqueo israelí: les evita el desenlace fatal, los libra de parecer un fracaso y, de paso, refuerza su narrativa. El obstáculo externo es su mejor coartada; sin él, quedan al descubierto.

Guillem Espaulella
Guillem Espaulella
Politòleg per la Universitat Pompeu Fabra.

NOTICIAS RELACIONADAS

bnew2025
bnew2025
bnew2025

Opinión