El padre de Lamine Yamal, Mounir Nasraoui, ha mostrado públicamente su disgusto tras el Balón de Oro 2025, que finalmente ganó Ousmane Dembélé.
Reacciones
Nasraoui considera que «ha pasado algo muy raro» durante el proceso de selección. Según él, este ha sido “el mayor daño moral a un ser humano”. Cree que su hijo hizo méritos más que suficientes para el galardón. También afirmó que Lamine no sólo es uno de los mejores jugadores del año, sino que va muy por delante de sus rivales y así lo ha demostrado sobre el césped.
Dijo que, aunque no se considera que haya sido robado el premio, la elección ha causado una herida profunda que va más allá de lo deportivo. Añadió que la noche de la entrega fue decepcionante para la familia, especialmente cuando pensaban que todo estaba claro.
Sí recibió un premio
Recordó que Lamine sí ganó el Trofeo Kopa al mejor jugador sub-21, lo que reconoce su talento y regularidad. Señaló que esto debería servir como motivación para próximas temporadas.
A su juicio, el Balón de Oro debería premiar al mejor jugador del año y no dejar lugar a dudas. Pese a ello, Mounir Nasraoui, abrió la puerta al optimismo y se mostró confiado: “El próximo año es nuestro”.