Donald Trump ha dado un paso polémico al anunciar que pedirá a los médicos de EEUU que no receten paracetamol a las embarazadas salvo para casos muy concretos como la fiebre alta. El presidente norteamericano ha basado su decisión en varios estudios que han relacionado el consumo de este popular medicamento con el riesgo de autismo en los bebés. Estudios que en España ya recogió el Hospital Clínic de Barcelona nada menos que en 2021.
Aunque la Administración Trump pretende revisar los prospectos de seguridad del medicamento y advertir públicamente sobre estos supuestos riesgos, la comunidad científica lo acusa de exagerado e irresponsable: hasta ahora, los estudios disponibles no demuestran una relación causal clara. Y es en las redes sociales donde más revuelo ha generado el anuncio.
El paracetamol es un analgésico y antipirético muy utilizado para aliviar el dolor leve y moderado y para bajar la fiebre. En general, se considera seguro cuando se toma dentro de las dosis recomendadas, pero una sobredosis puede causar daño hepático grave.
China e India, principales productores
En 2024, el mercado global de paracetamol estaba estimado en unas 275.000 toneladas de producto en volumen, con previsiones de crecimiento anual compuesto (CAGR) de alrededor de 4-5 % hasta 2035. En cuanto al API (la materia prima activa), en 2024 se produjo mundialmente más de 164.000 toneladas de paracetamol API, con China como mayor productor individual (58.000 toneladas), seguida por India (43.000 toneladas). Los principales laboratorios fabricantes de paracetamol se encuentran en Asia, destacando, entre otros, las compañías Granules India, Hebei Jiheng, Zhejiang Kangle y Farmson Pharmaceutical Gujarat.
En términos monetarios, según varios informes, el mercado para paracetamol, en todas sus formas (genéricos, OTC, ingredientes activos) está valorado en cientos de millones a miles de millones de dólares/euros, con estimaciones de crecimiento sostenido al alza.
Críticas generalizadas
Con estos datos, es fácil entender por qué el anuncio del presidente Trump ha generado tanta polémica tanto en EEUU como en el resto del mundo. Una polémica que en redes sociales se ha convertido en rechazo frontal a las críticas al paracetamol como posible origen de los trastornos del espectro autista. La ministra de Sanidad, Mónica García, ha criticado al presidente Trump por su anuncio y ha recordado que fue él quien «sugirió inyectarse lejía frente a la COVID». La entidad Autismo España, que agrupa a las asociaciones vinculadas a este trastorno, también han criticado a Trump por sus palabras.