Los polítologos suelen coincidir en que el tan mentado lawfare —acoso judicial por causas ideológicas— suele ser un argumento recurrente en los políticos populistas que no toleran la separación de poderes. Ahora, después de que el separatismo catalán haya popularizado el concepto obligando al PSOE a incluirlo en la ley de amnistía —primero aceptado a regañadientes pero luego asumido por los socialistas—, ha sido la exalcaldesa de Barcelona Ada Colau la que ha asegurado ser también víctima de dicho acoso. Y es que, según ella, por culpa de los ataques de la magistratura perdió las últimas elecciones en beneficio de Jaume Collboni, actual alcalde.
«Esto es el famoso lawfare o guerra judicial del que tanto se ha hablado. Al final todo se archiva, pero el daño está hecho», ha señalado en un mensaje de Telegram Colau después de que el Juzgado 18 de Barcelona haya archivado definitivamente la querella interpuesta contra ella por coacciones y prevaricación al fondo de inversión Vauras. «En las últimas elecciones, el actual alcalde del PSC obtuvo un concejal más con solo 141 votos más que nuestra candidatura. ¿Qué habría sucedido sin todos los titulares de lawfare y mi imagen yendo a declarar al juzgado en los medios de comunicación?», se ha preguntado en el mismo mensaje.
