La conselleria de Asuntos Sociales, dirigida por el republicano Chakir el Homrani, ha decidido este sábado confinar las 33 residencias para mayores ubicadas en la provincia de Lleida. De este modo, no se permitirán ni nuevos ingresos ni visitas en estas instalaciones hasta que no se resuelva la crisis sanitaria provocada por un rebrote de COVID-19 que ha llevado a la Generalitat a ordenar el confinamiento perimetral de la provincia.
Otra de las medidas adoptadas este sábado ha sido la ampliación de los servicios de Atención Primaria de la zona, con la instalación de un «dispositivo anexo» al CUAP de Prat de la Riba que, según ha informado la Conselleria de Salud, atenderá exclusivamente a «pacientes con sintomatología asociada al COVID-19».
Nuevas medidas frente a los rebrotes
Bajo el nombre de Área Sanitaria Móvil, este nuevo espacio tiene como objetivo «poder hacer una separación de circuitos para atender sin riesgo de infección a aquellas personas que necesiten atención urgente». El director del Servicio Catalán de la Salud, Adrià Comella, ha explicado que esta instalación no obedece a que el servicio de Atención Primaria de Lleida esté saturado, sino que «la situación de la comarca del Segrià requiere de nuevas medidas asistenciales para hacer frente al rebrote».
Comella, por otro lado, ha explicado que se están llevando a cabo cribados «intensivos» en las 33 residencias para mayores de Lleida. Una operación que está finalizada antes del próximo viernes y con la que Salud pretende atajar los nuevos rebrotes que puedan aparecer en este tipo de instalaciones. Para ello activará el «plan de contingencia específico» que se basa en la «realización de pruebas PCR a todos los residentes y a todos los trabajadores para, posteriormente, hacer los aislamientos que toquen, siempre bajo criterio epidemiológico».
Los trabajadores de las centrales futrícolas de la comarca también están siendo sometidos a cribado a través de pruebas PCR. Este sábado se han realizado «entre 300 y 400 de forma proactiva» y con la colaboración de las empresas y de la Diputació de Lleida. Comella ha señalado que es «imprescindible» hacer esta prueba «en todos los focos que vayan apareciendo».
