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Airbnb obliga a los usuarios en Barcelona a verificar la dirección de los nuevos anuncios

La iniciativa pretende ayudar a las autoridades contra malas prácticas y facilitar más las tareas de inspección

Turistas toman fotografías de la Sagrada Família en Barcelona.

Airbnb ha lanzado un programa piloto que ya obliga a los anfitriones a usar direcciones postales verificadas en los nuevos anuncios que se publican en la ciudad de Barcelona.

La iniciativa, vigente desde finales de agosto, pretende ayudar a las autoridades contra malas prácticas y facilitar más las tareas de inspección, según un comunicado de la plataforma de este martes.

Desde ahora, un anuncio no se publicará hasta que el anfitrión certifique que la dirección que da es la misma a la que él tiene acceso físicamente.

Fase piloto

Subir un anuncio incluye que el anfitrión dé una dirección postal, y unos días después recibirá una carta postal con un código para poder activar esa dirección.

Esto evita crear anuncios con direcciones incompletas o que no coinciden con el callejero de la ciudad, y dificulta que un anuncio que las autoridades identifiquen como fraudulento pueda vincularse de nuevo a esa dirección postal.

El sistema, que ya ha empezado a funcionar en fase piloto, se irá ampliando en los próximos meses hasta extenderse a todos los anuncios nuevos en la ciudad.

5.000 anuncios no cumplían la normativa

Barcelona y Airbnb comparten información de nuevos anuncios en la ciudad desde junio de 2018, lo que ha facilitado identificar y eliminar más de 5.000 anuncios que incumplían la normativa municipal, y ahora se facilita más la inspección, «en especial contra infractores reincidentes».

La directora general de Airbnb Marketing Services SL, Mónica Casañas, ha destacado que estas medidas se suman a acciones que han tomado en los últimos meses en Cataluña «para redoblar la seguridad en la plataforma, fomentar las buenas prácticas y facilitar el trabajo de las autoridades».

Entre las medidas está prohibir fiestas, restringir reservas a menores de 25 años; un protocolo de higiene; un canal para que vecinos denuncien molestias; impulsar una solución para registrar viajeros; un canal con las autoridades para peticiones de información sobre investigaciones; asesoría legal a anfitriones sobre normas locales; y promoción del pago de impuestos en la campaña de la Renta.

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