El número 1 de Vox en Cataluña, Ignacio Garriga, ha asegurado este lunes que, a pesar de los buenos resultados obtenidos por la formación en las urnas (11 diputados), «no es momento de alegría» para el partido liderado por Santiago Abascal. «La segunda fuerza en el Parlament», ha explicado, «es ERC y no podemos olvidar que hace unos días paseaba como a un héroe a Arnaldo Otegi, responsable de la muerte de muchos compatriotas».
Acompañado de Abascal, Garriga ha explicado que la formación tiene ahora «un gran reto por delante» que pasa por trabajar como «dique de contención» del separatismo y, a la vez, defender en la Cámara catalana cuestiones como el recorte de fondos para la «inmigración ilegal», el retorno del español a las aulas o acabar con el despilfarro del dinero público destinado por el independentismo al procés.
Santiago Abascal, por su parte, ha calificado los resultados de Vox en Cataluña como «una responsabilidad gigantesca ante el conjunto de los españoles». Tras anunciar que el partido llevará a los tribunales a todos los que han participado en el acoso a sus candidatos durante la campaña, Abascal ha subrayado que Vox empleará sus 11 escaños en Cataluña con «responsabilidad y altura de miras«. «Son unos malos resultados para España y para Vox», ha asegurado, «pero, como primera fuerza política nacional en Cataluña, tenemos la responsabilidad de construir una alternativa completa al frente nacional separatista, al socialismo sin escrúpulos y corrompido, al separatismo totalitario y al comunismo egoísta».
