La negativa por parte de los tribunales belgas a extraditar al rapero Valtònyc a España por un delito de enaltecimiento del terrorismo está generando controversia incluso entre las propias filas separatistas. Y es que, al contrario de lo que podría pensarse, no todos los actores del nacionalismo defienden a capa y espada al cantante radical. Uno de lo que ha cuestionado al intérprete ultra ha sido el director de la Escuela de Administración Pública de Cataluña, Ismael Peña-López, que en Twitter publicó un mensaje que ha desatado el enojo de gran parte del secesionismo. A saber: «No creo que la libertad de expresión tenga que amparar a Valtonyc. Al igual que dudo que pueda equipararse a terrorismo. Ni blanco ni negro».
El tuit no tardó en suscitar reacciones airadas entre el nacionalismo. Una de las más destacadas fue la del cantante y dirigente del Consell per la República, Lluís Llach. «Caramba Ismael. Es difícil, por no decir imposible, justificar lo que dices desde cualquier punto de vista democrático», sentenció el interprete. Ante la invectiva de Llach, Peña-López recuperó declaraciones polémicas de Valtònyc e indicó: «A mí esto me parece una abominación. No creo que sea legítimo pedir ir matando a gente. No es terrorismo, ni mucho menos. Pero no creo que la libertad de expresión pueda amparar pedir explícitamente la muerte de nadie».
Asimismo, Peña-López reflexionó: «No podemos aplaudir las políticas de otros países de cero tolerancia contra el extremismo y hacernos los tibios ante quienes piden para unos políticos que les peguen un tiro o pongan una bomba. No podemos». Sus argumentos no fueron contestados por Llach, pero si por centenares de tuiteros separatistas que lo cubrieron de insultos y acusaron a ERC de equidistancia en el caso Valtònyc.