Según las últimas informaciones, tanto el entorno de Carles Puigdemont como Oriol Junqueras mantuvieron contactos con la Rusia de Putin para conseguir apoyo para el proyecto secesionista catalán. Pese a ello, desde que comenzó la invasión rusa a Ucrania, es el separatismo el que no ha cesado de comparar los métodos autoritarios rusos con la «represión española» contra el secesionismo. De hecho, fue el propio Junqueras uno de los primero en establecer dichas comparaciones al señalar que tanto Rusia como España eran «estados que quieren imponerse» con «tentaciones autoritarias internas».
Ahora, la que ha se ha pronunciado en la misma línea ha sido la delegada adjunta del Govern en la Unión Europea, Erika Casajoana, durante una intervención en el Parlamento de Flandes. «Me preguntan, ¿hay algún ejemplo en Europa de los lazos amarillos? Sí. En Moscú. Si llevas un cartel blanco, te arresta la policía. En Cataluña, si llevabas una camiseta amarilla no podías entrar en un estadio de fútbol», relató.
Acto seguido, Casajoana arremetió contra lo que consideró un doble rasero inaceptable por parte de las autoridades europeas. «Lo que pedimos en Europa, y ni hemos conseguido todavía, es que defendáis los valores europeos en Cataluña con la misma energía y convicción que en Bielorrusia, en Ucrania y en Moscú». Y ha agregado: «No podéis decir a los ucranianos que son los campeones de los valores europeos y luego, cuando España nos pisotea, mirar hacia otro lado».
