El juzgado mercantil número 8 de Barcelona ha ordenado el cierre del concurso de acreedores del PDeCat, la formación heredera de Convergència y en la que militaban Artur Mas y Carles Puigdemont. La formación tiene, según la documentación aportada, un pasivo de 6,45 millones de euros. Según el auto, recogido por diversos medios, ningún acreedor ha solicitado el nombramiento de un administrador concursal.
De este dinero, 6,3 millones de euros corresponden a la cantidad que debe tener en cuenta la formación para afrontar la previsión a la que obliga la ley por estar procesada la formación en el caso del 3%. Los otros 150.000 euros corresponden a pagos a proveedores (130.000 euros) y a trabajadores (20.000 euros). El PDeCat, por otro lado, ya ha saldado las deudas contraídas con la Seguridad Social, Hacienda y otros organismos. Deudas que la formación siempre ha explicado que pertenecían a Convergència.
El PDeCat echó el cierre a finales del pasado mes de octubre. Fue entonces cuando su presidente, David Bonvehí, anunció la finalización de la actividad del partido a los militantes a través de una carta. La decisión se tomó tras las elecciones generales de julio, cuando la formación no logró representación ni en el Congreso ni en el Senado. Una situación que el mismo Bonvehí definió como «una derrota sin paliativos».
