El problema de la okupación en Cataluña ha adquirido dimensiones notables. Sobre todo, si se comparan su nivel de ocupaciones ilegales con el resto de comunidades autónomas españolas. Y es que, en 2023, la comunidad catalana ha sufrido más ocupaciones de vivienda que la suma de Andalucía, Comunidad Valenciana y la Comunidad de Madrid. Éstas tres últimas no se citan al azar, sino que son las que siguen a Cataluña en número de infracciones penales tanto de usurpación como de allanamiento de inmuebles. Ello a pesar de que, según el datos del Ministerio del Interior, las ocupaciones han caído en Cataluña un 14% con respecto a 2022.
Sin embargo, la comunidad catalana acumula el 40% de los 10.345 casos registrados en España. En concreto, 4218. Este dato, como se señala arriba, rebasa ampliamente el de comunidades con poblaciones similares. Así, la Comunidad de Madrid registra 1.025 ocupaciones (un 1% menos que Cataluña), Andalucía, 1.607 (un 6% menos) y Comunidad Valenciana (un 21% menos). Esto es, que Cataluña suma más que las tres regiones anteriores. Según los expertos, las razones de que Cataluña tenga tantas ocupaciones son: abundante tejido anarquista, permisividad y zonas de población masificadas —lo que provoca que halla pisos vacíos—.
