Este martes, la Fiscalía de Milán solicitó un año y ocho meses de prisión para Chiara Ferragni por «estafa agravada» relacionada con la venta de dulces navideños que comercializó bajo su marca. La petición fue presentada al juez Ilio Mannucci Pacini, por el fiscal Cristian Barilli, durante la vista previa al juicio del “caso Pandoro”.
Ferragni asistió a la audiencia junto a las otras dos personas imputadas: Fabio Maria Damato, su entonces mano derecha, y Francesco Cannillo, presidente de la empresa Ceralitalia. «Todo lo que hemos hecho, lo hemos hecho de buena fe, ninguno de nosotros se ha lucrado», declaró Chiara en la sala.
El juicio
El juicio empezó el 4 de noviembre en el Tribunal de Milán. La próxima audiencia está prevista para el 19 de diciembre, cuando la defensa tendrá la palabra y solicitará la absolución de los acusados.
El delito de estafa agravada que se imputa a la influencer puede acarrear entre uno y cinco años de prisión, según las circunstancias de cada caso. La pena total puede verse reducida gracias a las indemnizaciones ya abonadas, y a la ausencia de antecedentes penales. La sentencia se espera para mediados de enero.
El “caso Pandoro”
El “caso Pandoro” se ha convertido en uno de los episodios más controvertidos para la creadora de contenido. Todo empezó con la venta de productos supuestamente benéficos vinculados a su marca: “Chiara Ferragni”.
La creadora de contenido se ha declarado inocente del delito que se le imputa, asegurando que nunca tuvo la intención de hacer creer que la compra de los dulces contribuiría a la recaudación de fondos para el hospital Regina Margherita de Turín y para la fundación Bambini delle Fate. En su defensa, Ferragni habría destacado ante el juez las numerosas iniciativas benéficas en las que ha participado en los últimos años.
Los productos
Los productos en el centro de la polémica fueron el “Pandoro Balocco Pink Christmas, edición limitada Chiara Ferragni”, vendido en Navidad de 2022, y los “Huevos de Pascua Chiara Ferragni”, comercializados durante las Pascuas de 2021 y 2022.
La influencer se asoció con la marca Balocco para lanzar una versión especial de uno de los dulces. Su precio se incrementó de cuatro a nueve euros, ya que se hizo creer a los consumidores que cada compra contribuía directamente a la causa benéfica. Lo que los compradores desconocían es que Chiara ya había realizado una donación fija antes de la venta, cuando se firmó el contrato de colaboración entre ella, el hospital y la marca. En el caso de los huevos de Pascua de chocolate, colaboró con la empresa Dolci Preziosi.
La influencer continúa defendiendo que el problema del caso se debió a un fallo de comunicación y no a un intento de engañar a los clientes que compraron alguno de los dos productos. Sin embargo, la Autoridad Garante de la Competencia y el Mercado (AGCOM) calificó la acción como fraudulenta, al haberse realizado la donación antes de que los productos salieran a la venta.
Crisis reputacional
Desde el estallido del ‘Pandorogate’, la vida de Chiara Ferragni ha cambiado drásticamente. Perdió contratos de patrocinio, limitó su actividad en redes sociales, y se divorció públicamente del cantante Fedez.
La polémica afectó profundamente su imagen y su trabajo, y Ferragni reconoció que durante meses se sintió juzgada y señalada, aunque destacó que siempre se muestra auténtica frente a quienes la apoyan.





