Con todas las encuestas augurando un ascenso meteórico, Aliança Catalana se prepara ya para las elecciones de 2027. Su último movimiento ha sido la inauguración de la nueva sede del partido en Barcelona, que ha tenido lugar este viernes. Un acto presidido por la líder de la formación, Silvia Orriols, quien ha cortado la cinta inaugural arropada por numerosos simpatizantes de Aliança Catalana.
Ubicada en la confluencia de Villarroel con Gran Vía de les Corts, la nueva sede de AC en Barcelona representa sobre todo el peso que está empezando a tener la formación en Cataluña. «Me siento muy hornada de ver cómo el proyecto que iniciamos tímida y humildemente en Ripoll se ha ido extendiendo en toda la nación catalana», ha dicho Orriols en la inauguración. Y ha añadido que AC es ya «un proyecto consolidado» que se encuentra en «campaña permanente» para las elecciones de 2027. Una campaña en la que se dará prioridad a los municipios, en los que el partido lleva meses volcándose.
Sede ‘nacional’ en Ripoll
Oriol Gès, por su parte, ha indicado, en declaraciones recogidas por Girona Notícies, que la sede central de AC seguirá siendo la de Ripoll y ha avanzado que el partido ya prepara la inauguración de sus sucursales en Girona y Lleida.
El presidente de AC en el Barcelonès, Jordi Amela, ha afirmado que las elecciones de 2027 serán «muy duras» y ha añadido que el objetivo de este partido no es obtener una pequeña representación en el Ayuntamiento de Barcelona sino disputar la alcaldía.





