Las fricciones entre Junts y Unidas Podemos son cada vez más evidentes. En una entrevista concedida al Diari Ara, la secretaria general de la formación morada, Ione Belarra, señaló que ceder las competencias en materia de inmigración a la Generalitat solo trasladaría “las redadas racistas con perfil étnico” de la Policía Nacional a los Mossos d’Esquadra.
Política racista
La diputada navarra subrayó que el único camino que contempla su partido en este ámbito es la derogación de la Ley de Extranjería y “la regularización de todas las personas de origen migrante”.
En consecuencia, Belarra ironizó en ese tramo de la conversación al afirmar que no pueden compartir la demanda de los neoconvergentes, ya que en Podemos “no se ceden los votos para hacer política racista”.
Molestas con ERC y EHB
Sin embargo, el malestar del partido de Belarra no se limita, a su juicio, a las demandas de corte conservador de Junts o a las corruptelas del Gobierno encubiertas por Sumar. También existe cierto descontento con sus socios naturales: Esquerra Republicana y EH Bildu.
Pese a haberse reunido la semana pasada con los herederos de ETA, desde Podemos indican que “nos sentimos muy solas en el Congreso”. Un dardo que Belarra lanzó en el Ara y que arremete contra la política del “sí a todo —a cambio de competencias—” que, según Unidas Podemos, practica el nacionalismo con el PSOE.
Respuesta de Puigdemont
Por su parte, tras viralizarse un fragmento de la entrevista, Carles Puigdemont cargó contra Belarra. El líder de Junts acusó a la secretaria general de UP de “supremacista española y xenófoba”.
Una descalificación que, sin embargo, parece surgir de una mala lectura: no es que Belarra afirmara que los Mossos lleven a cabo, en exclusiva, redadas racistas, sino que, según Unidas Podemos, todos los cuerpos policiales son los encargados de blindar el racismo institucional. Y por ende, el traspaso de competencias, sin la derogación de la Ley de Extranjería, no soluciona nada.
