Quemar fotos del Rey es ya una tradición para el activismo secesionista, que suele practicarla a la mínima oportunidad. Así, a nadie ha sorprendido que manifestantes independentistas hayan quemado este viernes fotografías de Felipe VI y el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, durante la manifestación de protesta por su presencia en Barcelona. La quema de fotografías ha coincidido con el momento en que el monarca presidía la entrega de premios del Barcelona New Economy Week (BNEW) en la estación de França.
En estos momentos, varios centenares de manifestantes se encuentran a unos 200 metros de la entrada principal de la estación, después de que la protesta convocada por los CDR en el Arc de Triomf se haya unido hasta donde ANC y Òmnium han convocado una cadena humana. Una de las fotos quemadas incluía el texto Irresponsables, provocadores, no respetando el confinamiento.
Fuertes medidas policiales
Los manifestantes están separados del edificio por un fuerte dispositivo policial, con decenas de furgonetas antidisturbios que han blindado la estación y han cerrado otras calles del Born. Llevan banderas esteladas, además de algunas republicanas, y pancartas con el texto Catalunya no tiene rey, usan silbatos y gritan consignas independentistas y republicanas.
