En los últimos tiempos, han proliferado las manifestaciones hispanófobas de todo tipo protagonizadas por el nacionalismo catalán. Desde el acoso a un restaurante italiano por atender en castellano a la investigación llevada a cabo por la librería Abacus porque una de sus dependientas dio las gracias a una clienta en español. Ayer, la xenofobia nacionalista volvió a prender en las redes sociales por el hecho de que la primera persona vacunada en Cataluña se llamase Josefa Pérez y se expresase en castellano, así como por el detalle de que su residencia luciese un cartel que felicitase la navidad en este idioma.
La protagonista de la discordia, una anciana de 82 años vecina de Hospitalet y residente en el centro de la tercera edad Feixa Llarga, permaneció ajena a esta polémica, limitándose a declarar tras recibir la vacuna: «Estoy aquí para sonreir a la vida». Sin embargo, las reacciones en las redes a su origen gallego y al idioma empleado en sus declaraciones a la televisión no se hicieron esperar. Uno de los primero secesionistas en manifestar su indignación fue el internauta Andreu Monrós. «La primera persona vacunada en Cataluña, ni es catalana, ni habla catalán. Llamadme racista y xenófobo, pero como país nos lo tendríamos que hacer mirar», publicó Monrós en Twitter, si bien posteriormente borró el tuit.
La residencia lucía una felicitación navideña en español
Por su parte, otro activista secesionista, Joan Massanes, se expresó también en términos parecidos: «Llamadme identitario o nacionalista, lo soy, pero que la primera vacunada de Cataluña se llame Josefa Pérez y que en la puerta de su residencia se diga Feliz Navidad [en castellano], me entristece, mucho. Tanto por el hecho en sí, como porque es nuestro gobierno quién controla los detalles».
Otro tuit que circulo con profusión tuvo como autor al internauta Pere Xicoy, el cual se preguntó: «¿Tan difícil era vacunar en Cataluña primero a una señora o un señor que pudiera mantener una conversación en los medios de comunicación en catalán?». Acto seguido, añadió: «Si a Josefa se la hubiera vacunado unos segundos más tarde tampoco pasaría nada. Ahora ya me podéis llamar racista».
Ciudadanos lamenta las reacciones xenófobas
Tales muestras de hispanofobia no dejaron indiferentes a algunos políticos de signo constitucionalista. El líder de Ciudadanos en Cataluña y Jefe de la Oposición en el Parlament, Carlos Carrizosa, tras destacar que Josefa Pérez era la voz de la «sensatez, la esperanza y la alegría de vivir», denunció: «Hay nacionalistas que la atacan por hablar en castellano o ser originaria de Orense. La gran mayoría de catalanes estamos muy orgullosos de ella».
Mientras, otro diputado de la formación naranja, Nacho Martín Blanco, sentenció que como catalán sentía «vergüenza ajena» ante las críticas por que la primera ciudadana de Cataluña en recibir la vacuna no hable catalán. «Sigo pensando que la mayoría de los catalanes rechazamos tales actitudes, pero por desgracia el discurso oficial sobre el castellano las alimenta», juzgó Martín Blanco.
