El portavoz de ERC en el Congreso, Gabriel Rufián, ha advertido este viernes de que, si los republicanos no ganan las elecciones autonómicas del próximo 14 de febrero, peligra la continuidad de la mesa de diálogo con el Estado. Una mesa que solo ha celebrado una reunión, en febrero de 2020, y que es la respuesta del Gobierno a la abstención de ERC para que el socialista Pedro Sánchez pudiera convertirse en presidente de España.
En un mensaje publicado en Twitter, Rufián ha recordado que ERC se comprometió a conseguir que el lema separatista «Spain, sit and talk» se convirtiera en una realidad. Ha definido la mesa como «un espacio de dos gobiernos y cuatro partidos». Y ha asegurado que «volverá si Esquerra gana tanto este 14-F que arrastra a todos más allá de sus ganas«, tanto en Cataluña como en Madrid. «Lo demás», ha añadido el diputado, «es intoxicación«.
La mesa de diálogo se vio interrumpida por la irrupción de la pandemia del COVID-19. Una vez pasada la primera oleada del virus, el Gobierno y la Generalitat intentaron acercar posturas para volver a reunirse. Sin embargo, la inhabilitación de Quim Torra, que conllevaba la convocatoria de elecciones, hizo al Ejecutivo de Sánchez decidir aplazar el encuentro hasta que Cataluña no cuente con un Govern con posibilidades reales de negociar. Los republicanos han defendido a capa y espada este espacio de diálogo, frente a un JxCat que ha sido extremadamente crítico con el mismo, aunque sus representantes se han visto obligados a participar.
ERC, por otro lado, se ha convertido en uno de los socios prioritarios del Gobierno central. Sobre todo en lo relativo a la gestión de la pandemia de COVID-19. Además, ha dado su apoyo a los Presupuestos Generales del Estado para este año. Una postura que muchos entienden que tendrá como recompensa inicial el indulto de los condenados por el referéndum ilegal del 1-O, pero que, obviamente, tendrá también peso en la negociación con el Estado si la mesa de diálogo sigue adelante.
