El ministro de Sanidad, Salvador Illa, a pesar de la cuestionable gestión de la pandemia de COVID-19 que está haciendo el Gobierno, tiene tirón. En el PSOE lo constataron tanto en las elecciones de Galicia como en las del País Vasco, cuando la militancia de ambas comunidades pedía que Illa fuera a las campañas electorales del pasado verano. Su designación como candidato a la Presidencia de la Generalitat ha sido toda una sorpresa en Cataluña. Sin embargo, las encuestas constatan que la decisión de los socialistas ha sido adecuada.
Buen ejemplo de ello es la realizada por GESOP para El Periódico y que da al PSC la victoria en los comicios que se celebrarán el próximo 14 de febrero. Unas elecciones que, hasta ahora, parecían prácticamente ganadas por ERC, según todos los sondeos. Si en diciembre GESOP adjudicaba al PSC entre 27 y 28 escaños, ahora le otorga 35 o 36. Nada que ver con los 17 diputados que realmente tienen los socialistas en estos momentos.
ERC, por su parte, obtenía en diciembre entre 35 y 36 escaños. Un mes más tarde, baja a entre 32 y 33. JxCat, que en diciembre se hacía con 30-31 escaños, lograría ahora 29 o 30. En el caso de Ciudadanos, GESOP constata la tendencia a la baja de la formación presidida por Inés Arrimadas. En diciembre lograba entre 14 y 13 diputados. Ahora bajaría a 13-12 escaños. Catalunya En Comú-Podem sería superada hoy por la CUP, que obtendría entre 7 y 8 diputados, mientras que la formación liderada por Jéssica Albiach lograría 6 o 7.
Baja el PP, sube Vox
El PP también desciende en intención de voto desde el pasado mes de diciembre. El fichaje de Lorena Roldán como número 2 de la lista de Alejandro Fernández no ha arrastrado ningún voto. Más bien todo lo contrario: de los 7 u 8 diputados que GESOP preveía en diciembre, pasa en enero a 6 o 7. Vox, que concurre por primera vez a las elecciones de Cataluña, obtenía en diciembre entre 4 y 5 diputados y, un mes más tarde, sube a hasta 6.
Así las cosas y de arrojar las urnas estos resultados se abrirían diferentes escenarios. ERC y JxCat podrían volver a gobernar con el apoyo de las CUP. Sin embargo, también sería posible un gobierno con mayoría absoluta entre el PSC y ERC. Algo que estaría en concordancia con el clima de colaboración que mantienen en el Gobierno central el PSOE y ERC. Imposible de materializar sería un pacto de todas las fuerzas no independentistas que, unidas, también bordean la mayoría absoluta. Y que nadie olvide que la aritmética electoral pueda provocar una repetición electoral
