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ANÁLISIS / Cómo van las cuentas públicas tras el primer semestre: sombras y luces

Tras haber sufrido un fatídico 2020, ha transcurrido ya el primer semestre de 2021. Es hora de examinar cómo van las cuentas públicas. Conviene saber si se están arreglando las cosas. Este primer semestre arroja luces y sombras. Hoy nos vamos a referir a las sombras. 

PRIMERA SOMBRA: LA QUINTA OLA DE LA PANDEMIA 

Enero, Febrero y Marzo fueron unos meses catastróficos en España. Una media de 274 muertos diarios. Abril, Mayo y Junio fueron un alivio: la media bajó a 59 muertos diarios. La vacunación empezó a dar frutos. 

Sin embargo, al empezar el segundo semestre, las cosas se están torciendo. A partir del 1 de julio, de forma inesperada, se ha producido en toda España una explosión de contagios y de hospitalizaciones. Es la quinta ola de la pandemia. La variante delta. Todos los políticos, y muchos ciudadanos, han rivalizado en irresponsabilidad al no evitar eventos multitudinarios. 

Los políticos (de todos los colores) deberían asumir que su trabajo no consiste en darle gusto a la gente, sino en tomar las medidas coherentes con el bienestar general a largo plazo. Aunque sean impopulares. Esto vale para la salud y para la economía. Olvidarlo es la esencia del populismo, al que es bastante aficionado este Gobierno. El populismo es pan (más bien poco) para hoy y hambre para mañana.  

En lo que va de julio, España ha pasado de tener 2.375 hospitalizados (cifra muy buena) a tener 5.056 hospitalizados.  

En esta triste carrera, Cataluña lleva la peor parte: desde el 1 de julio hasta el viernes 16, ha pasado de 462 a 1.793 hospitalizados. Es un incremento brutal. Cataluña tiene hoy el 35% del total de hospitalizados del país. (Los datos son los publicados por Sanidad). 

El impacto económico es fatal. En España (especialmente en Cataluña, Valencia, Baleares y Canarias) la quinta ola ha supuesto un estacazo mortal para el turismo. El verano está perdido. La euforia del segundo trimestre ha dado paso a la depresión de estos días. Es de esperar que cuando esté  vacunado el 70% (¿mediados de septiembre?) se supere esto y empiece el rebote de verdad. Confiemos en el cuarto trimestre

SEGUNDA SOMBRA: DEBIL CRECIMIENTO DEL PIB 

En 2020 el PIB cayó un 10,8% respecto a 2019. Se situó en 1,121 billones de euros. Tremendo cacharrazo. 

¿Qué está pasando con el PIB en 2021? 

Primer trimestre: malo. El primer trimestre de 2021 fue malo. La pandemia castigó duramente la economía. También el temporal Filomena. En ese trimestre el PIB perdió un -0,5% respecto al 4º trimestre de 2020.  

2º trimestre: algo mejor. No hay datos del PIB del 2º trimestre. El Gobierno prevé un crecimiento del 1,4% respecto al PIB del primer trimestre. No es gran cosa.  

El Gobierno presume de que, comparado con el PIB del 2º trimestre del 2020, el de 2021 arrojará un crecimiento del 18%. Es una comparación burda. A causa del confinamiento, la economía se hundió en el 2º trimestre de 2020. No es un trimestre para comparar con nada. 

Esperemos que los datos reales de este 2º trimestre sean algo mejores del 1,4%. La afiliación a la SS ha aumentado mucho. El Banco de España prevé un 2,1% para el 2º trimestre, un 2,7% para el 3º y un 2,4% para el 4º. Así se llegaría al deseado +6,2% de crecimiento del PIB de 2021 respecto al de 2020. 

TERCERA SOMBRA: INCREMENTO DE LA INFLACION (¿ Y DE LOS TIPOS DE INTERES?) 

La inflación ha experimentado un repunte muy fuerte en 2021. En 2020 España tuvo una inflación negativa, de un -0,5%. Sin embargo, a 30 de junio de 2021, nuestro IPC interanual es de un +2,7%. El incremento del precio de la electricidad y del petróleo han sido letales. Es una subida preocupante. Sobre todo si se trata de actualizar en el mismo porcentaje pensiones y sueldos de funcionarios. No nos da el cuero.   

En la eurozona el IPC interanual a 30 de junio es el 1,9%. Está rozando el objetivo del 2% que tiene marcado el Banco Central Europeo. Esto ha reavivado el temor de que el BCE decida enfriar la economía y retire sus estímulos monetarios. Es decir, que ralentice sus compras de deuda pública. Que disminuya sus inyecciones de liquidez a los Bancos. Y que suban los tipos de interés de la deuda. Eso sería fatal para nosotros. Nuestra supervivencia depende de que el BCE mantenga bajos los tipos de interés. 

La señora Lagarde se ha apresurado a tranquilizar a los mercados. Ha dicho que el objetivo del 2% permite cierta flexibilidad en su consecución. Aunque el IPC de la eurozona supere puntualmente el 2%, los estímulos se mantendrán. Menos mal. Lo mismo ha anunciado la Reserva Federal de EEUU, donde la inflación a 30 de junio ha alcanzado la increíble cota del 5,4%. Las autoridades monetarias creen que el repunte de la inflación es un fenómeno temporal. 

Los tipos de interés de la deuda pública han subido en este primer semestre. En España, el bono a 10 años estaba al final de 2020 en el 0,06% anual. Este viernes 16 de julio estaba en el 0,36%. Se ha multiplicado por 6. Pero, de todos modos, gozamos de unos tipos de interés magníficos. 

Está claro que la voluntad del BCE es mantener los estímulos unos meses más, hasta que se supere la pandemia. El Programa de Compras de Bonos por la Pandemia (PEPP) termina en marzo de 2022. Por eso, muchos analistas prevén una subida de tipos para el año que viene. A ver cómo nos afecta. Cuanto más serio sea el Gobierno en la lucha contra el déficit, más a salvo estaremos. 

CUARTA SOMBRA: CRECIMIENTO DEL DEFICIT Y DE LA DEUDA PUBLICA 

DÉFICIT. En 2020 el déficit público ascendió a 123.000 millones de euros, un 11% del PIB. Acongojante. 

Según el Ministerio de Hacienda, a 30 de abril de 2021 el déficit consolidado de las Administraciones Públicas (excluídas Corporaciones Locales, cuyo déficit es irrelevante) asciende al 1,81% del PIB. Eso supone una reducción del 23% respecto al déficit del mismo período del año anterior. 

En esta línea, si el déficit final de 2021 fuese un 23% inferior al de 2020, nos pondríamos en un 8,40%. El Banco de España prevé un 8,2%. Ambas cifras son muy altas.  

La reducción del déficit es la asignatura pendiente más importante que tiene el Gobierno. Hasta ahora no ha dado muestras de querer aprobarla.  

DEUDA PÚBLICA. A 31 de diciembre de 2020, la Deuda Pública (Deuda del conjunto de las Administraciones Públicas) ascendía a 1,345 billones de euros. Un 120% del PIB.  

El último dato que tenemos es de 30 de abril de 2021. A esa fecha, la Deuda Pública ascendía a 1,389 billones de euros. Es el 124% del PIB de 2020. Son 29.550 euros per cápita

Así pues, en 4 meses, la deuda ha aumentado en 44.000 millones de euros. ¿Hasta dónde piensan llegar? 

Para salir del hoyo es imprescindible que el Gobierno diseñe una senda de reducción del déficit. A 4-5 años, en paralelo a los Fondos europeos. Una senda drástica, cumplible y que se cumpla.  

Jesús Santidrian
Jesús Santidrian
Inspector de hacienda jubilado

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