La entidad Escuela de Todos está organizando un sistema de autobuses para que puedan desplazarse hasta Barcelona quienes deseen participar en la manifestación contra la imposición del catalán que se celebrará el próximo 18 de septiembre. Esta asociación agrupa a 15 entidades que defienden el bilingüismo y que quieren mostrar su rechazo a la obligatoriedad del catalán en las aulas blindada por el Govern y en contra de la sentencia del TSJC que obliga a que un mínimo del 25% de las clases se imparta en castellano.
Un Govern sectario y un Gobierno cómplice
La manifestación, que se celebrará a partir de las 12.30 hora en Arco del Triunfo, es la respuesta de los constitucionalistas a «una administración catalana sectaria» y a un Gobierno central, el del socialista Pedro Sánchez, que es «cómplice de esta situación«. Así lo ha señalado Escuela de Todos en un mensaje publicado en Twitter y en el que añade que «sobran razones» para que los constitucionalistas salgan a la calle a protestar.
Alumnos y profesores discriminados
La entidad ha denunciado también estos días que la escuela catalana «no solo discrimina a los alumnos por razón de lengua» sino que, además, «presiona también a los profesores para que excluyan en todo momento al español como lengua vehicular». Una denuncia apoyada en testimonios de varios profesores como la exdiputado de Ciudadanos Sonia Sierra o el profesor de Economía Jorge Calero.
