Uno de los argumentos que esgrimen lo detractores de la manifestación contra la amnistía celebrada ayer en Barcelona es que no se trataba de una protesta transversal, sino de derechas. Sobre este aspecto, Àlex Ramos, el vicepresidente de la entidad organizadora, Sociedad Civil Catalana, en el programa de Gemma Nierga Café d’Idees, ha explicado que «mucha gente de izquierda nos ha llamado para decirnos que le daba respeto acudir a la manifestación». «Nosotros hemos hablado también con mucha gente del sector de izquierda. Hay gente importante que no yo creo que no querían venir por responsabilidad, porque no quieren hacer daño a sus siglas», ha relatado
Acto seguido, ha añadido: «Mucha gente importante no vino por miedo a las repercusiones que pudieran sufrir orgánicamente». Por otra parte, Ramos ha aclarado que la protesta no era « una manifestación contra el PSOE, ni mucho menos». «Era un manifestación contra una política concreta a favor de la amnistía y la autodeterminación. El Partido Socialista adopta muchas medidas, unas nos pueden gustar y otras no». Asimismo, ha puntualizado que no entran en «temas de partido», pero sí en asuntos transversales como la «territorialidad y el procés». Y, en este caso, la entidad opina que la amnistía no es una medida óptima para apaciguar España».
