Si todo va según lo previsto, 2025 será año electoral en Cataluña y Pere Aragonés, hoy presidente del Govern, no quiere perder el cargo. Bendecido ya por el partido como futuro candidato, Aragonés ha reforzado su imagen de cara al electorado ascendiendo a la actual consellera de Presidencia, Laura Vilagrà, a vicepresidenta del Govern. Además, ha decidido ascender también a Sergi Sabrià, que pasa de ser director de la Oficina de Estrategia y Comunicación del Ejecutivo autonómico a viceconseller de Estrategia y Comunicación, cargo en el que dependerá de Vilagrà.
Según ha explicado el Govern en un comunicado, Vilagrà ha sido quien ha llevado el peso de todas las negociaciones mantenidas hasta hoy entre la Generalitat y el Estado. Por ello Aragonés considera que ha llegado el momento de «fortalecer, de reconocer y de darle la máxima proyección para que la voz de Cataluña también sea defendida con toda la fuerza ante el Gobierno». Así, Vilagrà será la responsable a partir de ahora de negociaciones como las del traspaso de Rodalies, «la financiación singular y el déficit fiscal o el compromiso con la lengua».
En cuanto a Sergi Sabrià, el presidente ha destacado que no solo se ha ocupado de la comunicación del Govern sino que, además, «se ha dedicado a aquellos proyectos estratégicos de carácter transversal que requieren de una colaboración en los diferentes ámbitos del Govern muy intensa», como los relacionados con los fondos europeos.
