Marla-Svenja Liebich, nacida en 1970 como Sven Liebich, histórico activista neonazi vinculado al movimiento Blut und Ehre -Sangre y Honor-, conocido por sus discursos de odio, provocaciones y venta de material propagandístico extremista, será ingresada en una prisión de mujeres. Homófobo declarado, comercializaba con merchandising ultra, bates de béisbol para «frenar a la inmigración» y armas blancas.
If you don’t agree he’s found his authentic self and is valid, brave and exceptionally vulnerable, you are transphobic. pic.twitter.com/0WN8GZQ9Lm
— J.K. Rowling (@jk_rowling) August 21, 2025
Fue condenado 18 meses de prisión por incitación al odio y difamación en 2023, sentencia confirmada en instancias superiores de justicia alemanas en 2024 y ratificada definitivamente en mayo de 2025. Con su ingreso en prisión inminente, Liebich se acogió a finales de 2024 a la nueva Ley de Autodeterminación de Género, que permite a cualquier ciudadano alemán cambiar oficialmente de nombre y sexo con un simple trámite administrativo, sin necesidad de informes médicos ni psicológicos que avalen la transición.
Tras completar el procedimiento, Liebich pasó a ser reconocida legalmente como mujer bajo el nombre de Marla-Svenja, y fue condenada a cumplir pena en la prisión de mujeres de Chemnitz. Una decisión algo «atípica» por parte de alguien que durante años ha difundido mensajes tránsfobos y homófobos que esconde una intencionalidad evidente.
El caso se convierte en un ejemplo clarividente de cómo la normativa, aprobada en noviembre de 2024 para «garantizar derechos de las personas trans», se convierte en susceptible de manipulación y fraude cuando se abandona cualquier control o rigor médico. Pese a todo, las autoridades penitenciarias han defendido la aplicación estricta de la ley y el «respeto al género legal registrado».
