Ya ha trascendido la autoría del sabotaje en las vías del tren del AVE entre Vilobí d’Onyar y Figueres. El ataque, que provocó grandes retrasos y que consistió en quema de cables en distintos puntos de la línea, ha sido reivindicada por la plataforma Acció per la Indepencència. En redes sociales, este grupo radical ha calificado el ataque como «no violento y coordinado» como una acción para clamar contra España, la Generalitat y los partidos separatistas —a quienes consideran tibios en su lucha por la secesión. «No acatamos la rendición», han proclamado.
El hecho ha merecido la reprobación del diputado de Ciudadanos Nacho Martín Blanco, que ha resaltado la gravedad del sabotaje en redes sociales: «La anómala normalidad en Cataluña: los CDR, a los que el separatismo aplaude y jalea en el Parlament, reivindican los ataques al AVE. Estos ataques, tan habituales en Cataluña, pueden acabar en tragedia». Y ha concluido: «Sigan riendo y banalizando lo que pasa en Cataluña… Lo lamentaremos».
