La Conselleria de Salud de la Generalitat ha reubicado a los 18 residentes de un geriátrico de Vidreres al detectar que no cumplía las condiciones mínimas exigidas para garantizar la protección de los usuarios.
Según un comunicado, la Dirección General de Ordenación y Regulación Sanitaria ha ordenado el traslado de los residentes del centro privado y sin ninguna plaza pública Residència Vidreres, al registrar la falta de condiciones de higiene y que la estructura presenta problemas de mantenimiento y conservación.
La orden de traslado se firmó el 30 de junio y el viernes se culminó la reubicación en otros centros de las 18 personas que residían en el centro.
Inspección del centro
La decisión se ha tomado después de una inspección en el centro el 15 de junio, a petición del Servei Català de la Salut en Girona. Durante las visitas realizadas en la pandemia detectó «anomalías» en este centro.
La solicitud de la inspección respondía a la necesidad de garantizar la protección de los residentes y que los profesionales cumplieran con los protocolos y la normativa de la Conselleria.
En concreto, el centro no dispone de habitaciones individuales, los baños son compartidos y solo se dispone de un ascensor. La inspección señala que las instalaciones de la residencia necesitan con urgencia de un plan de mantenimiento y conservación que permita disponer de unas condiciones higiénicas sanitarias óptimas para atender a sus residentes con independencia de las directrices del coronavirus.
