Son diversas las voces constitucionalistas que han mostrado su sorpresa ante el hecho de que el conseller de Salud Manuel Balcells haya justificado el despido por motivos ideológicos de la enfermera andaluza que criticó el requisito de catalán en la Sanidad. Recordemos que el pasado viernes trascendió que a la enfermera se le acabó el contrato y el Hospital de Vall D’Hebron decidió no renovarlo. Preguntado por la cuestión, Balcells señaló que «todos los motivos por los cuales se le abrió el expediente eran suficientes para no renovarle el contrato». Asimismo, explicó que encontraba «ofensivo» tanto las formas de lo ocurrido —que no llevase mascarilla y que se encontrase en horario laboral— como el «contenido» de sus declaraciones.
«Exigimos la dimisión del Conseller por apoyar una caza de brujas contra una enfermera de 25 años y culminarla con su despido ideológico», ha manifestado en redes sociales el líder de Ciudadanos en Cataluña, Carlos Carrizosa. Y ha agregado:. «Nada les importa a estos fanáticos el déficit de personal sanitario en Cataluña: 22.000 enfermeros y 8.000 médicos». Por su parte, el catedrático de Derecho Internacional Privado Rafael Arenas ha advertido de que la Cataluña nacionalista se encuentra «cada vez más lejos de la democracia» y de que «si no reaccionamos, el siguiente paso será más doloroso».
